Voces alemanas
sobre América Latina hoy
Josef Oehrlein. Corresponsal para América Latina del diario alemán "Frankfurter Allgemeine Zeitung" en Buenos Aires.
La mirada hacia un país evoca siempre estereotipos. Si pensamos en Argentina inmediatamente se nos viene a la mente el tango; si pensamos en Colombia pensamos en la guerrilla. En el caso de Venezuela aparecen los conceptos claves: "Chávez", "revolución", "Bolívar". Tal vez nos acordamos también de Humboldt, pero no de forma inmediata ... Todas estas imágenes son estereotipos, detrás de los cuales se esconden muchas cosas. No existe una sola mirada hacia América Latina.
Mi primera experiencia importante tuvo que ver con las grandes diferencias que existen en el español que se habla en América Latina; así, por ejemplo, entre Chile y Argentina. Y no solo se trata de diferencias en el vocabulario o en la pronunciación. También las connotaciones son importantes, los matices en el significado.
Las imágenes sobre América Latina que se tienen en la mente corresponden a menudo a imágenes reales, por ejemplo a fotografías. Lo que a mí, en tanto que fotógrafo, me gustaría mostrar es la metamorfosis continua que se da aquí [en Buenos Aires]. Es algo que se nota, por ejemplo, en las casas. Entre todos los rascacielos se encuentran restos del modernismo, del neoclasicismo. Existen contrastes maravillosos. En realidad no hay una manzana en esta ciudad con edificios homogéneos, ni desde el punto de vista arquitectónico ni desde el estético. Siempre se encuentran engarces de algo ajeno o moderno. Esta diversidad es atractiva y apasionante, y al mismo tiempo es paradigmática para todo el resto.
Michi Strausfeld. Editora y escritora, trabaja en la editorial S. Fischer. Gracias a ella, la editorial Suhrkamp "descubrió" en 1973 la literatura latinoamericana moderna.
¿Si realmente existió aquél famoso "papelito"? Sí, existió esa lista de las grandes obras de la literatura latinoamericana que todavía no habían sido traducidas al alemán. Yo envié la hoja por carta a Unseld de Suhrkamp. Y con esta lista empezó todo.
La mirada alemana hacia América Latina era en aquél entonces una mirada muy limitada. Por suerte esto ha cambiado: gracias a la Feria del libro de 1976 en Frankfurt, que tuvo a América Latina como tema central, al festival latinoamericano "Horizonte 82" en Berlín y a la publicación sistemática de literatura latinoamericana por parte de la editorial Suhrkamp. Todo esto amplió y modificó la mirada alemana hacia los países latinoamericanos.
Si quiero conocer un país, leo a su literatura, no leo las declaraciones de su gobierno ni sus estadísticas. Los novelistas nos cuentan la historia de sus países. "Cien años de soledad" encierra, por ejemplo, cien años de la historia de Colombia. Y ahora deberíamos leer a los autores jóvenes. Pues así como ha cambiado el continente, también ha cambiado su literatura. Por eso yo sigo buscando. Me envían muchas cosas, pero no quiero renunciar a esa búsqueda. Y sigo fiel a mi principio de no publicar ningún libro que yo no haya leído con ganas y hasta el final. Esto no es fácil, pero como ya dijo Lezama Lima: "sólo lo difícil es estimulante". La literatura permite entender a la gente y sus costumbres. La literatura tiende puentes. Me gusta pensar que soy una pequeña constructora de puentes.
Ottmar Ette. Catedrático de letras románicas en la Universidad de Potsdam y experto internacionalmente reconocido sobre Alexander von Humboldt.
¿Por qué me fascina tanto la mirada de Alexander von Humboldt hacia América Latina? En primer lugar porque su ciencia es de una manera muy moderna una ciencia transdisciplinaria, intercultural y cosmopolita. Otro de los aportes innovadores de Humboldt es su perspectiva teórica para analizar fenómenos de globalización. Humboldt tiene una mirada abierta y dialógica hacia el Nuevo Mundo. Él se acerca a otras culturas desde la tradición científica europea. Pero al hacerlo siempre mantiene una postura autocrítica. A pesar de toda la movilidad, él es consciente de su punto de vista. Por todo esto Humboldt es para mí un "Weltwissenschaftler".
Su pensamiento nunca es estático, sino que siempre está en desarrollo ... Anota en sus diarios lo que quiere conservar en un momento dado, por ejemplo, sobre los indígenas de América. Esto puede contener también prejuicios y hasta pasajes que podríamos calificar de racistas. Sin embargo, Humboldt los relee una y otra vez hasta el final de sus días. Es significativo que no incluyese muchos de estos pasajes en sus publicaciones. Humboldt intenta integrar poco a poco todo en un complejo conceptual ... a medida que iba revisando una y otra vez sus propias posiciones. Humboldt es, en ese sentido, también dinámico. Constantemente transforma y modifica su propia mirada, que él mismo marca de manera consciente.
Klaus-Dieter Lehmann. Presidente del Instituto Goethe
El Instituto Goethe constituye desde ya varios decenios un puente sólido entre Alemania y América Latina. Existen allí 13 Institutos Goethe, 8 Centros Goethe y unas 25 asociaciones culturales. El proyecto de escuelas socias habilitará a través de la formación de profesores y el intercambio de alumnos hasta fines de 2010 a 55 escuelas para la enseñanza del alemán hasta el nivel del bachillerato. Las escuelas socias contribuyen por lo tanto a uno de los objetivos del Instituto Goethe: crear la estructura necesaria en América Latina para poder aprovechar a pleno las condiciones básicas favorables que existen en ella. Tenemos además un gran programa llamado "Cultura y Desarrollo" que busca fomentar la infraestructura necesaria para el trabajo cultural. Apoyamos la formación de curadores de museos, de bibliotecarios, directores de teatro y expertos en medios de comunicación; también con la perspectiva de poder contar con ellos como futuros socios. En realidad, alcanza con confiar en el gigantesco potencial cultural de América Latina y crear una suerte de comunidad de aprendizaje mutuo. Es muy fácil encontrar en América Latina excelentes socios para poder compartir ideas y perspectivas. ¡Da gusto trabajar así! América Latina tiene para mí un atractivo enorme gracias a su dinamismo y su creatividad.
Christoph G. Schmitt. Comerciante y Gerente General de la Asociación Empresarial para América Latina (LAV), Hamburgo, que es la red de la economía alemana con intereses en América Latina.
Nuestra mirada hacia otras regiones es determinada por nuestra propia perspectiva cultural. Las imágenes "clásicas" de América Latina han sido moldeadas, por ejemplo, por nuestra propia educación. En ellas América Latina equivale a Humboldt o a la emigración alemana hacia el sur de Brasil o hacia Chile ... También tenemos imágenes acuñadas por los medios de comunicación: una América Latina llena de carteles de droga, dictadores y guerrilleros. La mirada económica, en cambio, ve a América Latina como un mercado en el que Volkswagen y otras empresas alemanas compiten exitosamente.
Necesitamos una imagen más acertada que aquella que nos ofrece el Internet. Es necesario abrir los ojos, tener curiosidad, cuestionar cada situación sin ideas preconcebidas, y preguntarse no solo "¿por qué son así las cosas?", sino que también "¿por qué las veo yo así?"
Este es el mayor inconveniente de un mundo sobrecargado por los medios de comunicación: ya nadie cuestiona realmente las cosas. Nuestro mundo apurado y digitalizado está verdaderamente "overnewsed - but underinformed" (saturado de noticias, pero pobre en información). Un interés verdadero por una región, un intercambio real de opiniones, un intento serio de no permanecer en la superficie, todo esto solo es posible si uno es capaz de soltarse y sumergirse en una historia…
Cornelia Pieper, Ministra adjunta en el Ministerio Federal de Asuntos Exteriores.
Alemanes y latinoamericanos han construido a lo largo del tiempo un estrecho tejido de relaciones políticas, económicas, científicas y culturales. Gracias a estos vínculos, a una amplia concordancia con los conceptos politicos básicos y a valores compartidos, Alemania y América Latina se encuentran muy cerca la una de la otra. Muchas personas en Alemania están fascinadas por las culturas latinoamericanas. Queremos que los latinoamericanos sientan la misma fascinación por Alemania. En particular a través del Instituto Goethe, del Servicio Alemán de Intercambio Académico (DAAD) o de la Fundación Alexander von Humboldt queremos abrir espacios para un intercambio inspirador. El gobierno alemán quiere desarrollar las relaciones políticas con América Latina de una manera aún más activa. Alemania y la Unión Europea quieren apoyar conjuntamente el progreso social, económico y político para el cual los latinoamericanos han hecho tantos sacrificios, para el que trabajan y en el que todos nosotros depositamos nuestras esperanzas.