Expedición n.º 24:

dos años en la Amazonía boliviana

"... una unión de lo más afortunada entre ciencia y arte."
Otto Zerries, 1981

Entre 1952 y 1954 la etnóloga Karin Hissink (1907-1981) y el pintor Albert Hahn (1910-1996), quien más tarde se convertiría en su marido, pasaron más de dos años estudiando a grupos indígenas de las yungas orientales de Bolivia poco conocidos en aquel entonces. Visitaron a los chamas, los chimanes y los tacanas. Con estos últimos permanecieron más de un año. Su recopilación de los mitos de los tacanas consiste en 395 textos. Es la colección de mitos más amplia que ha sido publicada hasta ahora sobre una etnia sudamericana.

Muchas de las historias narran las actividades y las atrocidades del espíritu Einidu, un espíritu de la selva de apariencia muchas veces humana, dueño y protector de los animales. En su forma humana, Einidu es enano, barrigudo, de piel oscura, muy velludo, y tiene un pene en "forma de flecha". Lleva un sombrero grande.

Einidu tiene una personalidad ambivalente. Por un lado, alimenta a los jabalíes con frutas de su liana nuni, para que den a los cazadores buena carne. También ayuda a cambio de un poco de coca o tabaco, depositados para él en un saco diminuto, a los cazadores sin suerte para que tengan fortuna y buena caza. Por el otro lado, Einidu castiga a aquellos cazadores que matan a demasiados animales o los torturan, convirtiéndolos en serpientes o espíritus. A menudo aprovecha sus artes metamórficas para gastar bromas pesadas a los humanos. Se presenta a los hombres como si fuera su esposa, y a las mujeres con la apariencia de su marido. Al final, su perdición es su desmesurado apetito sexual: una mujer a la que acosa le tiende una trampa. Lo convence que se bañe en un gran recipiente, donde lo rocía con agua hirviendo. Einidu muere, pero uno de los muchos descendientes, que ha engendrado con mujeres, le sucede como nuevo Einidu.

Karin Hissink se reunió en diversas ocasiones en París con el famoso etnólogo francés Claude Lévi-Strauss. Conversaron sobre el interés de Lévi-Strauss de demostrar la presencia de motivos míticos en las artes plásticas, en especial en las artes ornamentales indígenas, a fin de poder determinar mejor las similitudes estructurales generales existentes en todos los géneros artísticos. El propio Lévi-Strauss mostró este procedimiento magistralmente en su obra "La ruta de las máscaras" (1977). El patrón dibujado en los tejidos de los indios tacanas, denominado "escalera del espíritu de la selva Einidu", la pintura de una liana del mismo nombre y el mítico episodio sobre este espíritu, según el cual aparece el motivo de la liana como escalera a su "morada", están en plena consonancia con las ideas del gran teórico estructuralista. Es decir, aún es posible reconstruir la diversidad referencial o la similitud estructural de los códigos de distintos géneros: con un bosquejo de una pieza de museo, una fotografía de un archivo y un texto etnográfico.

La monografía "Die Tacana I: Erzählungsgut. Wiesbaden: Franz Steiner 1961" ("Los tacanas I: tradiciones contadas") es la contribución más importante de Karin Hissink a los estudios sudamericanos.

Junto con sus tres otras monografías, revisadas tras su muerte por Albert Hahn, e ilustradas con cientos de dibujos de objetos, retratos de gran valor artístico y bosquejos etnográficos, constituye una contribución única al estudio de los valiosísimos tesoros etnográficos de Bolivia.

• Indígenas chama: 12 retratos de Albert Hahn
• Breve biografía de Karin Hahn-Hissink

Bibliografía sobre Karin Hissink: